El mercado inmobiliario no para de cambiar. Te contamos qué está pasando y cómo puede afectar el entorno geopolítico actual a la venta de tu vivienda.
Durante los últimos meses, los titulares se han llenado de noticias sobre conflictos internacionales, subidas y bajadas en los tipos de interés, cambios en la regulación del alquiler y nuevas exigencias sobre eficiencia energética. En medio de este panorama geopolítico tan agitado, muchos propietarios se preguntan si es ahora un buen momento para vender o si conviene más esperar a que el escenario se estabilice.
Lo cierto es que, a pesar de la incertidumbre global, el mercado inmobiliario sigue mostrando señales de actividad. Los compradores continúan activos, los tipos de interés comienzan a moderarse y las nuevas normativas están impulsando la salida de muchas viviendas al mercado de la compraventa.
Pero, ¿qué está ocurriendo realmente y cómo te afecta si estás pensando en vender tu vivienda? Pasemos a verlo paso a paso.
Conflictos internacionales: suben los precios y se acelera la compra
Los conflictos y tensiones en distintas partes del mundo tienen un efecto directo sobre la economía: aumenta la incertidumbre y suben los precios. Cuando esto pasa, muchas personas prefieren invertir su dinero en algo estable como la vivienda.
Además, la inflación empuja a los compradores a moverse rápido. Ante la expectativa de que en unos meses todo será más caro, optan por comprar ahora antes de que los precios sigan escalando.
Esta situación de urgencia por comprar favorece a los vendedores, ya que tienen más posibilidades de dar salida a sus inmuebles en un plazo de tiempo menor e incluso a un precio más alto, debido a que cuentan con más margen para negociar.
INFORME INMOBILIARIO EN BARCELONA
Evolución de precios de venta, alquiler y nº de compraventas
Tipos de interés a la baja: más facilidad para comprar
Después de varios años con hipotecas caras, el Banco Central Europeo ha empezado a suavizar su política monetaria, haciendo que los tipos de interés bajan y que las condiciones de financiación sean más favorables para los compradores.
Esta mejora en la accesibilidad al crédito está reactivando el interés por adquirir vivienda. Muchas familias que habían pospuesto su decisión de compra, ahora se sienten más seguras para hacerlo, impulsadas por la oportunidad de conseguir mejores condiciones hipotecarias.
Si estás pensando en vender, este es un contexto favorable. Que haya más compradores activos significa que hay mayor competencia por tu piso, lo que puede traducirse en ventas más ágiles y precios más atractivos.
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Regulación del alquiler en Cataluña: más pisos en venta y menos en alquiler
Las últimas leyes del alquiler en Cataluña han hecho que muchos propietarios se replanteen si merece la pena seguir alquilando o es mejor pasar sus viviendas al mercado de la venta.
Las limitaciones en los precios del alquiler ha reducido la rentabilidad de los nuevos contratos, provocado una caída significativa en la actividad del mercado de arrendamiento. De hecho, en el segundo trimestre de 2025, el número de contratos de alquiler en Cataluña ha disminuido un 20% respecto al mismo periodo del año anterior. Esta reducción, ha generado escasez de oferta de pisos en alquiler, mientras que la demanda de compra ha ido en aumento.
Muchas personas que no encuentran opciones para alquilar acaban optando por comprar, lo que dinamiza el mercado de compraventa. El resultado es un mercado más activo, especialmente en zonas con alta demanda y buenas conexiones como Barcelona ciudad o municipios cercanos como Reus.
Nueva normativa sobre eficiencia energética: vender antes de tener que reformar
Otro punto que muchos propietarios están valorando es el tema de la eficiencia energética. En los próximos años, las normas europeas serán cada vez más exigentes, y es posible que las viviendas con malas calificaciones energéticas tengan más dificultades para venderse o alquilarse sin hacer reformas.
Reformar una vivienda para mejorar su eficiencia puede ser caro (cambiar ventanas, aislar paredes, mejorar sistemas de calefacción…). Por lo que algunos propietarios prefieren vender ahora antes de tener que asumir esos gastos en el futuro.
Si tu vivienda tiene una etiqueta energética baja (E, F o G), puede ser un buen momento para valorar la venta y evitar inversiones futuras.
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Entonces… ¿es buen momento para vender?
En general, sí, el momento actual es muy interesante para vender. Pero, además, es especialmente interesante para aquellos propietarios que:
- Quieran vender sin tener que hacer reformas importantes.
- Tienen una vivienda que podría perder valor con las nuevas exigencias energéticas.
- Necesitan liquidez, pero las nuevas limitaciones de precio para los alquileres no les permiten obtener una rentabilidad adecuada.
- Buscan aprovechar el tirón de la demanda por la bajada en los tipos de interés y el miedo a una mayor subida de precios (que quizás nunca llegue a materializarse
- O, simplemente prefieren hacerlo ahora, con un mercado todavía dinámico y buenos precios.
No obstante, hay que tener en cuenta que cada caso es distinto. No es lo mismo vender un piso en el centro de Barcelona que una casa en Reus o en un municipio más pequeño. Por eso, lo ideal es pedir una valoración profesional que te permita establecer un precio real de mercado y el tipo de comprador en el que debes centrar tus esfuerzos de venta.
Si quieres estimar el precio de tu vivienda, puedes solicitar una valoración de precio gratuita y sin compromiso a uno de nuestros agentes inmobiliarios. De esta manera, podrás valorar si te conviene más vender ahora, o si prefieres esperar a que el entorno geopolítico evolucione.
Quiero valorar mi vivienda
Te recordamos que para conocer más en detalle la evolución del mercado inmobiliario en Cataluña, tienes a tu disposición nuestro último informe inmobiliario. Un PDF en el que encontrarás la evolución del precio de la vivienda tanto en venta como en alquiler por zonas, ritmo de crecimiento de las operaciones inmobiliarias y las previsiones de precio para los próximos meses del CEO de Vivendex Francesc Quintana.
Si tu vivienda tiene una calificación energética baja (E, F o G), puede ser un buen momento para vender antes de que entren en vigor normas más exigentes. Reformar puede ser caro, y vender ahora permite evitar gastos adicionales y aprovechar un mercado activo.
Cuando los tipos de interés bajan, las hipotecas se vuelven más accesibles y más familias pueden permitirse comprar. Esto aumenta la competencia entre compradores, lo que puede traducirse en ventas más ágiles y, en algunos casos, incluso mejores precios.
Las nuevas leyes de alquiler han reducido la rentabilidad de los nuevos contratos, por lo que muchos propietarios optan por vender sus viviendas en lugar de alquilarlas. Ante tal escasez de oferta de viviendas para alquilar, muchas personas en busca de alquiler acaban optando por el mercado de la venta, aumentando aún más la presión sobre este mercado.
